Más de 70 países adoptan el “tratado de Altamar” en las Naciones Unidas con el
propósito de proteger al menos el 30 por ciento de los océanos del mundo, después de 15 años de negociaciones y diálogos
El Acuerdo, ya firmado por países de la Unión Europea, la UICN (Unión
Internacional de Conservación de la Naturaleza) y más de 40 ONGs, busca
proteger las aguas internacionales a través de herramientas legales para expandir
las zonas oceánicas protegidas, formular marcos para las evaluaciones de impacto
ambiental y conseguir un uso sostenible de la biodiversidad marina en las zonas fuera de jurisdicción nacional.
Los 75 artículos que integran el “Acuerdo sobre la Conservación y Uso Sostenible de la Biodiversidad Marina más allá de las Jurisdicciones Nacionales” tienen por objetivo:
- La protección del 30% de los océanos, situados en aguas internacionales.
- La conservación de la fauna marina al contener la sobrepesca.
- La regulación del uso de transportes marítimos para aminorar su impacto sobre los hábitats acuáticos.
- La moderación de la minería y explotación de los suelos oceánicos.
Este acuerdo dará formación a la Secretaría de Biodiversidad Marina más allá de
las Jurisdicciones Nacionales, un organismo independiente de la ONU y cuya
sede tentativa estaría en Bruselas, Bélgica o Valparaíso, Chile. Dicho organismo
daría forma a la jurisdicción y lineamientos para defender estos mares, los cuales
hasta el momento se encuentran sin protección organizada.
Al entrar en vigor, el tratado tendría un impacto positivo sobre especies marinas en
peligro de extinción por sobrepesca: tortugas marinas, peces, ballenas, delfines y
tiburones (entre otras), ya que sanciona un uso responsable de los recursos y
delimitará protocolos para salvaguardarlos de la contaminación.
“El océano es la sangre vital de nuestro planeta, y hoy, ustedes le han dado nueva vida y esperanza para dar al océano una oportunidad de luchar”
dijo el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, a los delegados
“Lo hicimos!”- Declaró Alejandro Celorio Alcántara, consultor jurídico de la
Secretaría de Relaciones Exteriores. Enfatizó también los más de diez años de
esfuerzo multilaterales requeridos para este logro, y mencionó el rol activo que ha
tenido México en el proceso, así como los esfuerzos de América Latina para la
conservación ambiental.
Por el momento, el tratado ha sido firmado por la Unión Europea y países como
Estados Unidos, China, Australia y Noruega. En América Latina, ya han firmado
México, Chile, Colombia, Cuba, Colombia, Costa Rica, Honduras, Bolivia y
República Dominicana.
En México, la Semarnat (Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales)
indica que deberá ser ratificado a la brevedad, resaltando el riesgo que corren los
ecosistemas interconectados al océano, y la importancia de la información
científica en las evaluaciones de impacto ambiental para las actividades
económicas.
Se espera que el tratado entre en vigor para la próxima conferencia de la ONU
sobre los océanos, la cual tendrá lugar en Niza, Francia en el año 2025.